Cualquier lugar puede ser idóneo si se combinan los elementos adecuados. En Amberes encontramos “The Jane Restaurant”, un rincón del mundo que nos demuestra cómo un mobiliario austero en un entorno casi místico puede ser sinónimo de éxito.
Descubre The Jane Restaurant
Una atmósfera en blanco y negro, acompañadas de una lámpara estelada que rompe con la tradicional escena recreada en una antigua iglesia es el camino para conseguir un afamado renombre. Si a eso le añadimos varias zonas delimitadas por un mobiliario más cómodo u otro más funcional, conseguimos abrirnos a todo tipo de públicos. La luz sin duda es la protagonista, por eso, en estos ambientes mejor huir de lo barroco, de lo evidente, y recurrir a líneas más desnudas donde los taburetes o las sillas tengan el mismo ‘look’ y hagan el mismo esfuerzo por respetar la verticalidad. Líneas finas, austeras, monocromáticas, rectas, siempre rectas.
