La sidra es todo un símbolo de la gastronomía asturiana, y servirla requiere todo un ritual. Esta bebida alcohólica de baja graduación se obtiene de la fermentación del zumo de manzana, lo que le da un gran sabor y múltiples propiedades naturales. Además, como la cerveza o el vino, es ideal para acompañar diferentes tipos de comida, por lo que puede ser un plus en cualquier restaurante. ¿Quieres saber cómo servirla correctamente? ¡Estate atento!
Hoy en el post de Sillasmesas vamos a descubrir cómo se hace, el proceso que le da ese sabor tan característico, y cómo servir la sidra, un ritual propio y único de esta bebida.
Cómo se hace la sidra
La sidra se obtiene mediante la fermentación alcohólica del jugo de las manzanas previo proceso de prensado. Posteriormente, madura en un tonel.
En primer lugar, se recolectan las manzanas, se trocean y se prensan. El primer mosto de la manzana es mucho más dulce, pero al mezclarse alcanza el dulzor típico de la sidra. Después se deja en toneles de madera para fermentar, bajo temperatura controlada, que junto con las levaduras y las bacterias del entorno hace que el mosto dulce se transforme en sidra.
Actualmente, puedes encontrar en el mercado diferentes tipos de sidra, de pera, fresa, mora o piña. Una bebida que pese a no ser de las más consumidas en la hostelería ha ido evolucionando y reinventándose y cada vez tiene más adeptos.
Cómo servir la sidra
Uno de los aspectos más importantes antes de servir la sidra es tener en cuenta su temperatura, se recomienda mantenerla entre 12º y 14º y no agitar la botella. Después llega el momento de escanciarla intentando no manchar nada alrededor; esto requiere de mucha práctica y pericia. Al servirla de esta forma lo que se busca es despertar el gas carbónico que se encuentra de forma natural en la sidra y saborear al máximo su sabor.
Te aconsejamos seguir estos trucos para ser un gran profesional escanciando sidra:
- Intenta adoptar una postura corporal recta para conseguir un buen equilibrio y que así tu pulso logre estabilidad.
- Levanta el brazo derecho con la botella por encima de la cabeza lo más estirado que puedas mientras con el brazo izquierdo sujetas el vaso. Para que salga bien debe estar colocado hacia abajo y en el centro de tu cuerpo.
- Ahora sí, puedes comenzar a escanciar la sidra. Procura mantener el equilibrio para que el vaso no se mueva de la posición indicada. La idea es que el reguero de sidra sea el que va buscando el vaso.
- Por último, recuerda que no debes de llenar el vaso sino un par de dedos para echar el denominado culín de sidra.
Según un estudio de la consultora Nielsen respecto al consumo de bebidas en 2018, España es uno de los países con más viñedos a nivel mundial, pero su bebida más demandada es la cerveza. Respecto a la sidra, entre mayo de 2018 y el mismo mes de 2019 –gracias a factores como las sidras gasificadas, los nuevos sabores, el menor grado de alcohol y sus propiedades más saludables frente a otras bebidas– la facturación de estas aumentó en un 38%.
¡Ya puedes servir sidra como un gran profesional! No tienes excusas, ahora solo tienes que dejar que tus clientes disfruten del espectáculo y saboreen una buena sidra en tu restaurante. Seguro repiten la experiencia.